"Quienes acumulan riqueza no la van a repartir, cada vez seremos más pobres y la vida más aburrida"

Quién diga entender lo que está pasando con la ultraderecha en Europa y en USA nos engaña, no hay forma de entenderlo mediante ninguno de los análisis sociológicos al uso, desde Hobbes a Saskia Sassen. Los simples y buleros con argumentos arteros y muchas ganas de engañar nos dicen que es cosa de la manipulación de las redes, del algoritmo interesado.

Pero en realidad, todo es resultado de la absoluta torpeza sumada, uno a uno, por todos aquellos ciudadanos estultos y vagos mentales que no quieren enfrentarse a su realidad alienada y reconocer el único hecho incuestionable: quienes acumulan riqueza no la van a repartir, cada vez vamos a ser más pobres y la vida será más aburrida, no podremos comprar la felicidad que nos ofrecen.

Nos tienen cogidos por las partes nobles, vamos a desear siempre más de lo que tenemos, seremos como ellos, acumularemos todo lo que podamos, por eso los votamos. No vamos a vivir una última gran aventura final, nadie entre los nuevos profetas de cara pálida puede garantizar que nos sentiremos plenamente integrados en un grupo o en una nación antes de morir por ella.

Todo se acabará si no somos capaces de reclamar la dignidad humana de vivir sin soportar la sumisión de unos hombres por otros, renunciando al consumo, al paraíso del propietario que nos ofrecen, eso sí, mientras podamos pagarlo.