"Se me hace muy difícil confiar en el orden y los principios del sistema"

Aportamos y contribuimos esperando el platónico Estado de bienestar y, en el momento de la verdad, recibimos las migajas de un Tercer Mundo, ahogándonos bajo el lodo mientras otros se ahogan en burocracia estéril.

El dicho "el pueblo salva al pueblo" es una consecuencia directa e inmediata de que el Gobierno no salva al pueblo. Ni están ni se les espera. A nosotros, los ciudadanos, solo nos mueve el sentimiento de pertenencia, empatía y unidad, que es lo único que nos separa de los animales salvajes.

Intento confiar en el orden, los principios y los procedimientos que articulan todo este sistema del que formamos parte, pero se hace muy difícil y, sobre todo, injusto. Aquí hay muchos responsables, tanto por acción como por omisión. Solo espero que el tiempo actúe y ponga a cada uno donde se merece estar, sinó perderé la poca confianza que me queda.