Recientemente, hemos podido obervar como la llegada de una nueva moda de origen asiático ha cautivado por completo la atención de los jóvenes: los 'Sonny Angel', una figura de angelito de unos siete centímetros, coleccionables, con distintos sombreros como frutas o animales.
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Sin embargo, quisiera subrayar que su reciente popularidad parece estar profundamente influida por las redes sociales, donde los 'influencers' muestran sus colecciones, creando esa necesidad por parte de la audiencia de comprar una figurita.
Esto nos demuestra, una vez más, como la viralización tiene el poder de influir en el consumidor. En este caso, ha transformado una moda asiática en un símbolo global.