Piezas que no encajan en el 'caso Torbe'

He estado leyendo con calma las noticias que han ido apareciendo  sobre David de Gea e Iker Muniain, salpicados por el 'caso Torbe', y  hay algunos detalles que parecen incongruentes. Otros, sin embargo,  arrojan una coincidencia pasmosa.

1. El hobby. El portero del Manchester United no estuvo presente en  la habitación del hotel: únicamente se encargó de organizar el  encuentro entre dos futbolistas de la selección sub21 y dos muchachas.  Entonces, ¿cuál es su objetivo en todo este asunto? Según la presunta conversación mantenida entre De Gea y la testigo protegida, este le comenta que lo hace por sus compañeros. ¿De verdad se metería en un  lío de narices, cortando el bacalao y no terminándolo, al menos,  sentándose a la mesa a probarlo? ¿Tan solo por puro entretenimiento?

2. La chapuza. Lo peor de todo este embrollo es, sin lugar a dudas,  el intento por parte de la testigo protegida de cazar a De Gea. Al  parecer, la chica había estado manteniendo contacto con el portero  español para reunir pruebas para la denuncia. En casos tan deplorables  como estos, lo mínimo que se requiere es una buena estrategia para  sonsacar información. ¿Pero a quién se le ocurre usar la excusa de querer quedar con un chico en el mismo hotel? Es decir, ella y su otra compañera fueron, supuestamente, forzadas a mantener relaciones  sexuales con los dos futbolistas, ¿y tú quieres volver al mismo hotel  para tener una cita con un chico muy especial? Desde luego que no es  el pretexto menos llamativo para obtener la respuesta sobre el nombre  del hotel.

3. El señalado. Es posible que haya sido un despiste -muy grave- por  parte de De Gea. O puede que esa conversación sea falsa. Veamos: los  dos futbolistas que asistieron al encuentro se negaron a cualquier  tipo de grabación para que sus carreras deportivas no se vieran  dañadas. No querían que quedara ninguna constancia de lo sucedido.  ¿Pero por qué De Gea acaba vendiendo a Muniain en esa supuesta  conversación con la testigo protegida y no menciona el nombre del otro  futbolista? Además, si pretendían evitar toda prueba que indicase que  esa cita tuvo lugar, ¿por qué De Gea y Muniain intercambian mensajes  con una de las chicas del hotel?

4. La casualidad. Ignacio Escolar, director de 'eldiario.es', afirma en un artículo que el sumario del 'caso Torbe' había estado bajo  secreto hasta esta semana. No creo en las casualidades sin ninguna  justificación lógica. Porque debe haberla sí o sí. Debe existir un  motivo que explique por qué este revuelo coincide con el primer día de  la Eurocopa. No me atrevo a expresar la inexistencia de los abusos  sexuales, de la misma forma que tampoco lo aseguro. Para eso ya está  la justicia. Pero ciertas piezas no terminan de encajar bien...