"Sustituir el pesebre de la plaza de Sant Jaume por una estrella es estrellarse"

Los hay que nacen con estrella o que tienen estrella; es decir, que les acompaña la suerte que les es esquiva a otros. Y los hay que, con sus desconcertantes decisiones, pueden estrellarse. Viene ello a cuento del cambio del tradicional pesebre navideño en la plaza de Sant Jaume de Barcelona por una iluminada estrella de 20 puntas evocadora del origen del Universo.

El alcalde pretende eludir la polémica suscitada en otras campañas sobre la instalación del belén y opta por su radical supresión. El pesebre sintetiza un hondo sentimiento de pertenencia a una comunidad y la Navidad es un momento estelar de reencuentro familiar, de afirmación de valores compartidos y de arraigo en las tradiciones.

La simbología del pesebre navideño forma parte consustancial de nuestra cultura y religión cristiana. Quitar el belén, poniendo en su lugar una estrella es estrellarse.