
Sabemos por qué visitarás Catalunya
Playas cristalinas, picos y rutas de montaña y un patrimonio artístico único.
Playas cristalinas, picos y rutas de montaña y un patrimonio artístico único.
El turismo interior está de moda: Catalunya tiene rincones bucólicos donde darse un chapuzón.
Aunque puede parecer que todo parte del mismo lugar, el viñedo, lo cierto es que recorrer Catalunya para explorar sus 12 denominaciones de origen vinícolas permite descubrir paisajes totalmente distintos, con una personalidad propia que luego se transmite a sus vinos.
La firma Naturland presenta este verano importantes novedades aptas para todos los públicos.
Los conciertos, como los veraneantes, se trasladan a la Cerdanya durante el mes de agosto.
Esta es, quizás, una de las obras modernistas más completas y mejor conservadas pero más desconocidas por el gran público.
Nos es fácil resumir en pocas líneas la cantidad de monumentos que tiene Barcelona, una ciudad que puede presumir de espacios únicos como el Park Güell, la Sagrada Família, cientos de lugares con encanto y monumentos de alto valor histórico y artístico, que no pueden faltar en la agenda del viajero.
Esta pequeña localidad leridana es un auténtico museo al aire libre para los amantes del graffiti.
Adentrarse en las calles de Peralada supone un salto instantáneo hasta la época medieval, con sus calles empedradas, sus rincones con encanto, conventos y restos de la muralla y, presidiéndolo todo, el imponente castillo que le ha dado fama. Aquí se trata de relajarse y de disfrutar no sólo del patrimonio artístico si no también, y sobre todo, de la profunda y arraigada cultura del vino que ha imprimido carácter a esta pequeña localidad situada en el corazón del Empordà.
Rodeados de historia y de naturaleza, los pueblos medievales son uno de los principales atractivos arquitectónicos en el territorio catalán.
Catalunya es un territorio repleto de belleza y en más de una ocasión ha servido de escenario para producciones de cine a nivel internacional.
Volar en globo aerostático ha dejado de ser un lujo y son muchas las opciones para divisar los Pirineos, la Costa Brava o los volcanes de Olot a vista de pájaro.
Entre sus numerosos atractivos destacan dos: La Montaña de Sal, que con sus 120 metros es tan sólo la punta de un enorme diapiro de cerca de dos quilómetros de profundidad. El visitante podrá acceder hasta los 86 metros, para disfrutar del espectáculo de formas y texturas que ofrece el macizo salino. Durante años, fue una de las minas de sal potásica más importantes del mundo, y hoy se ha transformado en un equipamiento cultural de primer nivel.
Cuando uno sube a la torre de las horas se da cuenta de por qué Pals es una villa tan especial. Ubicada en un enclave privilegiado, con la silueta recortada del Montgrí al fondo y las Islas Medas enfrente, con los arrozales alrededor y el conjunto de casas y calles medievales, e incluso con una extensa y dorada playa dentro de su municipio, este no es un destino turístico cualquiera.
Asomada al mar y a sus rocas de formas imposibles, este pueblo ampurdanés conserva todo el encanto marinero, natural y único.
Pocas comarcas concentran tanto atractivo en su territorio. Las inmensas montañas del Pirineo, con sus rutas y deportes de aventura, junto a monasterios e iglesias testigo de glorias pasadas: planes para todos los perfiles y bolsillos. Viajar al Ripollès es sinónimo de naturaleza, cultura y gastronomía de proximidad y de calidad.
A lo largo del litoral, la provincia de Barcelona recoge una amplia oferta de playas donde los perros son bienvenidos entre los bañistas.
Las noches de verano, cuando el sol ha dejado de apretar y las prisas desaparecen, son el momento ideal para tumbarse al aire libre y observar el espectáculo que ofrece el cielo nocturno.
El parque natural ofrece maravillosas vistas, playas únicas y un extenso patrimonio arquitectónico con iconos como St. Pere de Rodes
Bienvenidos, de nuevo, a la Catalunya turística. Este mes de junio ha recuperado ya las cifras a las que estábamos acostumbrados antes de la debacle del covid-19. Han ayudado, por supuesto, eventos como el Primavera Sound y sus dos semanas de conciertos, las ferias y congresos que vuelven a captar viajeros y el regreso del tan esperado turismo internacional - aunque habrá que seguir esperando al visitante asiático -. Y es que Catalunya atrae por muchos motivos.
En esta época del año todo invita a salir y compartir nuevas experiencias. Proponemos algunas tan originales como cantarle al sol, vincular vinos con literatura o darse un antiguo banquete egipcio.
Declarado Patriomonio Mundial por la UNESCO en 1997, el antiguo Hospital de la Santa Creu i Sant Pau de Barcelona es el conjunto modernista más grande del mundo y, también, la obra más importante del arquitecto Lluís Domènech i Montaner.
Magia medieval y naturaleza pura. En una escapada a L’Anoia uno debe callejear y perderse por pueblos como La Llacuna, con sus vestigios medievales, o subir hasta el castillo de Vilademàger, en sus alrededores.
Entornar los ojos, respirar, y dejar que el río y su magnífico entorno entre por todos los sentidos. Porque aún quedan lugares capaces de sorprender al viajero. El recorrido final del río Ebro y su delta, con la enorme riqueza paisajística que le confieren, son los rasgos distintivos de este territorio.
Hay un lugar donde el viajero tiene la oportunidad de vivir la naturaleza en estado puro, caminar por senderos desconocidos e iniciar experiencias nunca antes vividas, Lleida.
Si existe un emblema de la ciudad de Castelldefels, ese es su castillo. Una construcción que ha acogido siglos de historia entre sus imponentes murallas y que todavía, hoy en día, sigue escribiendo nuevas páginas en su biografía.